Somos una generación privilegiada. Asistimos a un grado de desarrollo científico y tecnológico capaz de resolver muchos de los grandes problemas a los que se ha enfrentado la humanidad, como el hambre, la salud y la pobreza, y al mismo tiempo vemos cómo a diario se destruye la vida sobre el planeta, se contamina, la tierra, el agua y el aire y aumenta la temperatura global a un ritmo que no tiene precedentes en la historia.
Somos una generación que vive en un mundo lleno de problemas. Entre el 60 y 70 % de los ecosistemas del mundo se degradan a un ritmo mayor que el necesario para recuperarse. La ineficiente gestión del medio ambiente y los recursos naturales genera colosales pérdidas económicas cada año. La contaminación atmosférica es ya el cuarto factor de riesgo más importante de muertes prematuras, contribuye a 1 de cada 10 muertes en todo el mundo y causa grandes pérdidas de bienestar e ingresos. La naturaleza está bajo amenaza: un millón de especies de animales y plantas están en riesgo de extinción en algunas décadas.
Quizá por ser capaces de ver todo esto, somos la generación que no se conforma con alzar las copas pidiendo un mundo mejor, sino que necesita hacer del mundo un lugar mejor que el que encontramos al nacer.
Una generación vinculada con esa pasión que nos mueve, con la necesidad de poner nuestros talentos al servicio de un objetivo superior al económico: queremos que nos vaya bien, claro que sí, pero además queremos que eso ocurra a partir de alcanzar un impacto positivo en la sociedad.
La generación que elige ser parte de la solución. Que escoge el compromiso. Que alza la voz para denunciar el problema medioambiental y que propone recorrer el camino abierto por la Sustentabilidad, por la Economía Circular, por el emprender con Propósito.
La generación que se educa para llevar adelante acciones y políticas de gestión del medio ambiente y de recursos naturales, porque sabemos de su importancia para el crecimiento económico y el bienestar humano. Somos la generación que se atreve a señalar que es urgente revisar, repensar y reformular el modo en el que producimos, consumimos y descartamos las cosas que consumimos.
Nuestra generación atraviesa tiempos de cambio. En Green Drinks BA elegimos crecer en ese cambio. Mirando en nuestro interior. Formándonos como profesionales. Capacitándonos. Poniendo nuestro talento al servicio de un impacto positivo para el Planeta. Generando acciones con propósito.
Arrancamos el 2021 con esperanzas y fuerzas renovadas para continuar construyendo y creciendo juntos.
Gracias por ser parte. Vamos a hacer realidad ese mundo por el que vale la pena soñar.