Movilidad Sustentable

El pasado martes 16 de junio, y en el marco del Foro Megaciudades organizado por la Cámara de Industria y Comercio Argentino-Alemana, compartimos un nuevo encuentro de Green Drinks Buenos Aires en donde tuvimos la posibilidad de conocer un poco más sobre Movilidad Sustentable a partir de tres emprendimientos e iniciativas: Carpoolear, Muvin, y el proyecto ganador del Foro Megaciudades 2015. El evento esta vez se realizó en el espléndido Salón de Conferencias de la UCA (Avenida Alicia Moreau de Justo 1600) donde, al finalizar las exposiciones, todos los presentes tuvieron la posibilidad de degustar una gran variedad de exquisitos vinos orgánicos de la Feria de Vinos Orgánicos, que estuvieron acompañados de deliciosos tentempiés de verduras y carnes de igual calidad.

El primer orador fue Alejandro Leston, Cofundador y gerente de Muvin, una empresa dedicada a brindar soluciones de movilidad liviana, que tiene como lema el “Moverse mejor”, que no tiene por qué significar trasladarse en bicicleta ni en ninguno de los productos que ellos ofrecen, pero sí en buscar una mejora en la manera en que la gente y las empresas se movilizan. En dar la mejor opción y la más adecuada para cada viaje. En esta charla, Leston puso el foco en una arista en particular: la movilidad en el ámbito empresarial. “No hay ninguna duda del rol de la movilidad dentro de las empresas. Si no hay transporte no pueden llegar los empleados, los productos no llegan a los consumidores. Un transporte deficiente impacta muchísimo en la eficiencia de una empresa, tanto en lo económico como en la performance del trabajo que se hace”, expresó, y luego completó la idea: “Sin duda, el transporte es uno de los mayores activadores del comercio”

Pensando en el impacto ambiental y en los congestionamientos que se generan en la Ciudad de Buenos Aires, fue como el equipo de Muvin pensó en una solución alternativa aplicada a la logística de las empresas. De ahí que surgiera su nueva unidad de negocios:

Bullitt, una bicicleta Cargo fabricada en Copenhagen, Dinamarca, que con el mismo ancho que una bicicleta convencional y sólo unos kilos más pesada, puede transportar paquetes, mercaderías, etc. Estas unidades están siendo requeridas fundamentalmente por empresas que hacen repartos y distribuyen encomiendas en el microcentro. Y, a diferencia de las furgonetas que se suelen utilizar, que congestionan el tránsito al parar en doble fila, o generan gastos extra en estacionamiento, con estas bicicletas pueden cargar los productos mientras los van repartiendo libremente por la Ciudad.

Para Leston, las principales barreras con las que se encontraron al momento de pensar y desarrollar alternativas en materia de movilidad sostenible fueron culturales. “Desde el primer Green Drinks que asistimos, hemos escuchado de todo: ‘Que esto no es Holanda’, ‘que acá la gente no tiene respeto’, miles de cosas. Sin embargo, hace poco nos llegaron las primeras bicicletas de carga y, prácticamente, se vendieron todas. Y no son baratas. Es decir, localmente también existe la voluntad de hacer cosas”, concluyó.

Quien luego tomó la palabra fue Gabriel Weitz, fundador de Carpoolear, la primera aplicación argentina que permite a través de Facebook compartir viajes en auto con otros usuarios de su entorno. El carpooling es una práctica popular en Estados Unidos y Europa, donde se realiza de manera organizada para lograr aumentar el número de viajes compartidos y evitar la congestión vehicular, la contaminación ambiental, y ahorrar así dinero y tiempo.

Weitz comenzó la charla con una reflexión. Retrotrayéndose a la Edad Media, nos recordó que en aquella época en Europa la gran mayoría de la gente no se bañaba. Y esto estaba bien visto. Bastante más adelante en el tiempo, en la década del ’50 (¡ya del siglo pasado!) la mayoría de la gente creía que fumar no traía consecuencias negativas, incluso, hasta lo recomendaban los mismos médicos. Era otra práctica bien vista a nivel social, que al parecer envolvía a las personas que fumaban en un halo seductor y canchero. “Pongámonos un segundo a pensar qué va a decir dentro de 30 años la próxima generación o la generación de mis hijos. ¿De qué se van a reír y horrorizar sobre lo que hacemos nosotros hoy en día?”, nos interpeló Weitz, y luego continuó: “Probablemente de muchas cosas. Pero hay una que tengo muy en claro. Se van a horrorizar de ver que nosotros íbamos manejando una persona por auto”.

Fue contra ese paradigma de “un auto por persona” que Gabriel junto a un grupo de amigos se revelaron. Así nació Carpoolear, plataforma que lanzaron en septiembre de 2013, y hoy ya tiene más de 26 mil usuarios. “Y más importante que eso, es que tenemos una gran comunidad carpoolera, que son personas que postean los viajes, invitan a sus amigos, suben las fotos”, señala su fundador, y cuenta que este año decidieron subir la apuesta. Al carpooling interurbano, le sumaron el cotidiano: “Carpoolear MAS”, una plataforma cerrada, privada para empresas, instituciones, gobiernos que quieran ayudar a la movilidad sustentable de sus empleados, estudiantes, etc. “La idea es poder compartir estos viajes de la oficina a la casa, de la casa a al facu, etc. Con todo esto lo que tratamos de demostrarle a la gente es que este dogma de una persona un auto es erróneo, anticuado y no va más”, enfatiza.

Weitz invitó a los gobiernos a colaborar con estas iniciativas, y contó como en una de las tantas autopistas en Washington DC, hay carriles exclusivos de carpooling, donde solo pueden ir automóviles que vayan cargados con dos o más personas. La segunda y última invitación que hizo fue para los participantes del encuentro, alentándonos a sumarnos a la aplicación y a comentarla entre nuestros amigos y allegados que estén necesitando hacer un viaje. “Porque de acá a 15, 20 años voy a tener un hijo adolescente que seguro me va a mirar con cara de sobrador, y me va a decir: ‘En tu época iban todos en auto, perdían horas y horas, se la pasaban contaminando’; y yo lo quiero mirar a los ojos, y decirle: ‘Sí, pero yo empecé a Carpoolear, y me sumé a ser parte del cambio’. Así que los invito a todos a ser parte del cambio” 

Nancy Lago, la Ganadora del concurso del Foro Megaciudades 2015 fue la última en hablar. Su proyecto, llamado Post Ap, es una plataforma online de seguimiento del transporte automotor de pasajeros. Su ámbito de aplicación es la región metropolitana de Buenos Aires, y el ámbito de influencia son 2500 km2, donde habitan 15 millones de personas. Según datos de la Comisión Nacional de Regulación del Transporte, durante 2013 el sistema de transporte automotor de pasajeros transportó 1709 millones de pasajeros en todo el año. Los vehículos afectados son 9500.

Al momento de desarrollar el proyecto Nancy tuvo en cuenta un dato muy importante. Los subsidios estatales. En la Ciudad de Buenos Aires los colectivos que circulan por el territorio reciben dos mil millones de pesos por año y, en la Provincia esta cifra alcanza los nueve mil millones. Sin embargo, esto no se ve reflejado en la calidad del servicio. “Uno puede pagar $3,50 por un colectivo con aire acondicionado, que te lleva bien con un buen chofer o puede pagar $3,50 por un colectivo de hace 15 años que está destrozado y el motor se está por fundir”, comenta la ganadora del concurso, y agrega: “El usuario puede recibir cualquier cosa por lo que está pagando y esto también se debe al poco control que existe”

Esta plataforma es un sistema de información geográfico que tiene, por un lado, una versión web y, por el otro, una aplicación que brinda información en tiempo real sobre la ubicación de cada unidad que está en funcionamiento en la vía pública; identifica el número de interno del colectivo, el año de fabricación, y la ubicación de las paradas. “Esto sería como una contraparte que tendrían que ofrecer las empresas por recibir subsidios estatales”, explica Lago. Además, va a proporcionar información estadística: la frecuencia de los colectivos, las zonas crónicas de demora, y los tiempos promedios de recorrido de las diferentes líneas. ¿Cómo se lleva a cabo? Brindándoles GPS a las cerca de diez mil unidades que circulan en la región metropolitana. Algunas de estas, incluso, ya cuentan con estos sistemas para uso privado, así que solo sería una cuestión de coordinación. La información que brindan los GPS se recepciona a través de antenas, y luego se vuelcan en un servidor

Nancy finalizó apelando a la participación activa de los usuarios. “Muchas veces se habla del ciudadano 3.0, el ciudadano que genera información y que empieza a exigir un poquito más del Estado. Una vez que sabemos que esto nos cuesta como ciudadanos un montón de dinero, tenemos que empezar a exigir que funcione como se debe”, concluyó. El proyecto de Nancy será presentado ante altos funcionarios del sector público y privado, esperando recibir apoyo de ambos sectores.